La historia irreconocible

Teódulo López Meléndez Cuando Catón, el gran tribuno del Senado, vio llegar los objetos y conocimientos griegos a su amada ciudad supo que la Urbe estaba perdida. En buena manera vislumbró lo que los filósofos del posmodernismo llaman el "hombre estético". En otras palabras, vio que Roma caería vencida por la cultura griega. Los políticos no terminan de aprender que quienes hacen la historia que vale la pena son los creadores, más que todo los que viven en el lenguaje. Puede decirse que Aníbal, con sus elefantes y su terquedad, cruzó los Alpes y que Bolívar cruzó los Andes en procura de imitar su grandeza, pero fue Polibio, trasladado a Roma como esclavo de guerra, (a quien realmente hay que prestarle atención), el que se preguntó sobre el sistema político romano en procura de una explicación de cómo aquellos toscos habían empleado la modesta suma de 56 años para acabar con una de las más esplendorosas civilizaciones que hayan existido sobre la faz de la tie...