Educación y cultura

 



 

Teódulo López Meléndez

 

La relación entre educación y cultura lo es entre dos términos estrechamente ligados. Se ha proclamado a la educación como la gran panacea, la solución a todos los desequilibrios y a  todas las penas.

Olvidamos el prevaleciente concepto de educación como método de ascenso social lo que lleva a la necesidad de una revisión del debate educativo-cultural que es, al fin, un debate ético-político.

 

Jerone Bruner, uno de los más importantes conceptualizadores contemporáneos sobre el tema, en sus variados libros, pero en uno clave, “La educación como invento social”,  nos recuerda que la educación está al servicio de la cultura, por lo cual debe modificarse constantemente. Sin dejar de admitir a la escuela en su proceso socializador y de habilidades básicas, la coloca como difusora  hacia la evolución. Esto es, la cultura utiliza a la educación como herramienta lo que obliga a esta última a rediseñarse constantemente, inclusive para romper los propios paradigmas culturales obsoletos.

 

La educación está sujeta a la cultura y debe satisfacer sus exigencias. Podríamos “colegar” así que la oferta generalizada de que “todo se arregla con educación” es incorrecta pues lo que esta debe hacer es transmitir la cultura. Si volvemos a Bruner hay que superar los modelos reduccionistas y mecanicistas del aprendizaje memorístico. Los estudiantes no son receptores básicos de conocimiento para  pasar a ser constructores activos de significados, punto clave en la relación cultura-educación. Jean Piaget ya había hablado de “aprendizaje por invención”.

 

Entendemos la complejidad de la relación cultura y educación, pero nos hemos dedicado aquí sólo a mostrar la insuficiencia de esa oferta, ya caída al terreno de la demagogia, de que con educación se arregla todo. La educación es un ayudante de la cultura, no la panacea en sí, en el sentido de encontrar los caminos para comprender en toda complejidad.

 

La palabra cultura tiene su origen en el latin cultus, participio pasado de colere que significa 'cultivar'. En la cultura nos movemos en las prácticas individuales y colectivas, en la lengua, en los modos de vida, costumbres y conocimiento, enumeración mínima, pero acertemos al decir que con ella, y desde ella, actuamos u omitimos sobre la polis.

 

@tlopezmelendez

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