La difícil tarea de Biden

 



Teódulo López Meléndez

No es la primera vez que el exceso de federalismo juega sus bazas en el sistema electoral norteamericano. Donde no existen normas comunes para cuando y  como contar los votos suceden episodios, agregada la prudencia de millones con voto adelantado o por correo, lo que produjo lo que todos sabíamos: Trump iba a arrancar adelante y Biden lo iría alcanzando.

Pero las observaciones sobre el sistema electoral son apenas burbujas frente al fin de un período al mando de un populista de derecha que, para culminar el desastre, se empeña en denuncias de fraude que alega le arrebatan la victoria, unas que serán rechazadas por la institucionalidad judicial.

Es la era Trump, una que los norteamericanos deberán pasar de página con un esfuerzo sostenido. Una que sacó a flote todos los vicios subyacentes en la sociedad norteamericana, desde racismo hasta xenofobia, desde machismo hasta supremacía blanca. Hasta los recuerdos de la guerra de secesión comenzaron a enarbolarse en las banderas confederadas.

También salieron las virtudes, como una institucionalidad ajena a las pretensiones de un personaje que debe ser analizado preferentemente desde la psiquiatría. Quedémonos con lo político: el populismo que azota al mundo sufrió una importante derrota. En lo práctico queda por ver lo que podría intentar en los dos meses que le quedan en la presidencia. Lo cierto es que sale fortalecida la democracia, que Estados Unidos se alza desde el suelo donde estaba y eso alegra, se simpatice o no con esa nación, puesto que las consecuencias mundiales serán obvias, como su regreso a multitud de acuerdos de donde Trump se marchó. El primero será el retorno al Acuerdo de París sobre cambio climático.

Basta y dura tarea la que enfrentará Joe Biden. Deberá tratar de sanar las heridas, reunificar a su nación y, al mismo tiempo, avanzar en temas como la atacada cobertura sanitaria, hacia la redefinición de la política exterior y en todas sus promesas electorales para restaurar fe y confianza. Un Partido Republicano entregado a Trump deberá revisarse y se duda lo haga. Se suma la espera sobre si Biden tendrá éxito en su misión.

Por su parte, los venezolanos deberán aprender a mirar a otros sin los lentes distorsionados por su propia miopía.

@tlopezmelendez

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