Teódulo López Meléndez Son tres los temas. La negociación No asistir a la reunión del 18 de enero en República Dominicana fue calificada por mí como un error garrafal y esa opinión la sigo sosteniendo. Ese argumento del ofendido se hacía valer in situ, con todas las formas de presión en la mano, luego de la matanza de El Junquito y de las sanciones de la Unión Europea. Eso hace un negociador con sentido. Se agregó, a posteriori, para justificar el extravío, que no estarían presentes los cancilleres de México y Chile, ya molestos por lo que veían como poco serio, pero olvidando que estarían sus segundos en un mundo de washchap, de skype y, en fin, de comunicacion instantánea. Una cosa había quedado demostrada ante la imbecilidad repetitiva de que esos encuentros sólo servían para que el régimen ganase tiempo: los necesitaba en un afán desesperado por tratar de rebajar las sanciones internacionales que, si bien, eran individuales, sembraban la desconfianza en ...