La evanescente realidad Teódulo López Meléndez Lo real es lo que existe, podría definirse por oposición a lo situado en el terreno de la imaginación o de la ilusión. No obstante, tal simplismo ha sido rechazado por la filosofía pues, para comenzar, los sentimientos y las emociones también son reales, tanto como la fantasía. El primero en desconfiar de los sentidos fue Platón al distinguir entre una realidad sensible e imperfecta captada por ellos y el mundo de las ideas, o Aristóteles, al suministrar el concepto de que cuando una posibilidad se concreta surge una nueva realidad. El punto fundamental estaba en la importancia atribuida a los sentidos en la comprensión del mundo, de allí a la conclusión platónica de que lo observado por los sentidos no era más que el reflejo de la verdadera realidad situada en el mundo de las ideas, lo que conllevaba a considerarlo com...